El origen del Laboratorio de Metodologías Críticas en Ciencias Sociales y Salud se remonta
a comienzos de 2020, año en que la Universidad de Chile abre un proceso de postulación
para la formación de Laboratorios en Humanidades y Ciencias Sociales. Durante dicho
período, marcado por el contexto sociopolítico post estallido social vivido el año anterior en
Chile, surge entre académicas y académicos de las facultades de Ciencias Sociales y
Medicina la idea de crear un laboratorio que responda a la necesidad de visibilizar el rol de
las metodologías críticas en la investigación social.
El objetivo fue disponer un espacio de encuentro que buscara respuestas al creciente
malestar al interior del mundo académico, institucional y ciudadano respecto a la falta de
reciprocidad con las comunidades involucradas en los proyectos de investigación e
intervención social. Este cuestionamiento se encuentra en el seno de los fundamentos
teóricos, prácticos y epistemológicos del enfoque metodológico crítico al entender la
investigación como parte de un proceso cuyo horizonte debe ser la transformación social.
El LICSS desarrolló los días 19 y 20 de mayo de 2022 un encuentro que contó con amplia
representación internacional a través de decenas de participantes y especialmente con las
conferencias inaugurales y de cierre. La primera estuvo a cargo de la doctora Consuelo
Chapela, procedente de México, y la segunda fue responsabilidad del sociólogo español
Tomás Rodríguez-Villasante. Además, reunió a investigadores e investigadoras de distintas
disciplinas que, a partir de sus experiencias, habilitaron discusiones en torno a cuatro temas
centrales en las metodologías críticas de investigación social:
1. Desde dónde: el lugar del feminismo y las perspectivas de coloniales
2. Cómo: participación social y tensiones en metodologías críticas
3. Aprender haciendo: procesos de enseñanza/aprendizaje de metodologías críticas
4. Para qué: metodologías críticas y participativas en la contingencia político-social.