Bernard Lievegoed describe el desarrollo del niño en fases de siete años, estudiando cómo cada frase tiene sus propias características. Expone que nuestros niños sólo podrán llegar a ser hombres felices, sabios y juiciosos si, desde el principio, en su educación se tiene en cuenta el desarrollo del cuerpo, del alma y del espíritu. Los cambios en el cuerpo son muy conocidos: cambio de dientes, crecimiento, pubertad... El desarrollo psicológico corre paralelo al físico y no es menos importante, examina así la relación del niño y el mundo que le rodea, describiendo la experiencia en la etapa preescolar, escolar y adolescente en un claro y conciso camino, así como un método de educación em armonía con el desarrollo del niño.
Bernard Lievegoed desarrolló una impresionante labor en Holanda. Doctor en medicina, no se ciñó sólo a este campo. Fue presidente del NPI (Netherlands Pedagogical Institute). Fue rector del "Vrije Hogeschool". A parte de todo lo anterior, hay que añadir una constante actividd en colaboración con el Gobierno Holandés y distintas instituciones oficiales, en 1983 recibió la "Pluma de Oro", premio literario otorgado por la Real Asociación de Escritores de Holanda.
Falleció en diciembre de 1992 a sus 87 años, dejando un amplio legado.