En un vuelo nocturno de Londres a Boston, Ted Severson coincide con una mujer tan espectacular como misteriosa, Lily Kintner. Con un par de martinis de más, los dos extraños comienzan a jugar al juego de la verdad y revelan detalles muy íntimos de sus vidas. Ted habla sobre el declive de su matrimonio y afirma que está seguro de que su mujer lo engaña con otro. En el fondo, le cuenta, siempre fueron dos almas muy dispares condenadas a no entenderse. Pero a medida que van abriendo sus corazones, el juego se vuelve más oscuro cuando Ted, bromeando, dice que podría matar a su mujer por lo que ha hecho, y Lily se ofrece a ayudarlo. Según ella, hay personas que merecen morir, y una esposa infiel es una de ellas…