«Neil Gaiman apunta que escribió el libro Mitos Nórdicos para una generación entera que piensa que Thor es un superhéroe Marvel. Félix Vega no solo abraza la misma idea, asimismo la desarma y la amplía, deconstruyendo tanto la mitología escandinava como el cristianismo en el proto-descubrimento vikingo de América, con el choque entre fuerzas matriarcales y patriarcales. Porque en este viaje el mito se conecta a la geografía: no es casualidad que los hombres delnorte naveguen sobre masculinos dragones de madera y con ellos penetren esta tierra nueva, en ambas acepciones -la Vinlandia de los boreales y la América occidental- de acepción femenina. ¿Quién es la “Mujer Águila” sino una región entera, esta hembra absoluta que divide los océanos con su forma de cáliz/útero? Thor y la Mujer Águila es una fantasía de historia mitológica: más allá del terror que experimentan sus personajes ante lo desconocido, de aquella fascinación que despertará en un antiguo dios barbudo la presencia de una mujer, que es al mismo tiempo una nueva cultura, una nueva forma de concebir al mundo y a sí mismo. Vega hace una espectacular jugada al presentarnos deidades que temen más al paganismo de esta nueva mujer que a la autoridad tan falible de la cruz cristiana, paradigma que le otorga a la novela gráfica una reflexión especialmente contemporánea. Como pieza última en el ajedrez visual y narrativo del creador de Juan Buscamares y Duam, acaso el vértice que cierra una trilogía de esta América legendaria, esta nueva obra llega para transmitir una preciosa alquimia de ideas en oposición y fusión, a través de su característica maestría gráfica y con una paleta de colores deslumbrante. Una historia altamente simbólica de religiones anquilosadas, dioses hambrientos y peligrosos, amor, vida, muerte y renacimiento, donde los monstruos marinos del Viejo Mundo se encuentran con las ballenas blancas del Nuevo» (Francisco Ortega).
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