Existe un vacío en la historia política y social chilena: la participación de las mujeres en el trabajo asalariado y en los movimientos políticos a comienzos del siglo XX. Elizabeth Q. Hutchison expone y explica el surgimiento y la importancia del activismo feminista de las mujeres trabajadoras en las primeras décadas del siglo pasado en Chile. Da cuenta del auge y la caída de las sociedades de mujeres trabajadoras, el tratamiento de las mujeres obreras y su sexualidad, las respuestas de la elite hacia las asalariadas y el activismo político de las mismas.
La industrialización y el cambio urbano en Santiago tuvieron importantes efectos en las mujeres, las que se incorporan al trabajo en condiciones muy deterioradas. La presencia femenina en las calles y fábricas de las urbes chilenas provocó fuertes cambios en las políticas obreras masculinas, que asumieron el trabajo femenino como un problema social y una oportunidad política a la vez. El rostro femenino de la industrialización –celebrado entonces a través de las Escuelas Profesionales de Niñas y exposiciones públicas de las industrias femeninas– entra en contraste con “la paradoja de la mujer obrera” evidenciado por el reformismo social de la mujeres de elite, con la preocupación de la Iglesia Católica y con los debates parlamentarios sobre la incipiente legislación social. Todo ello se expresa y documenta en los principales periódicos y la prensa obrera de la época
Año: 2015
Pais: Chile
Paginas: 350
Medidas: 6 x 21 cm