Arthur Conan Doyle es el creador de Sherlock Holmes, el detective más célebre de la historia de la literatura. Tan excéntrico como brillante y resolutivo, el huésped del 221b de Baker Street eclipsó la fama de su propio creador resolviendo insólitos casos, como el que se le plantea en esta novela: después de que sir Charles Baskerville aparezca muerto en extrañas circunstancias, su médico solicita los servicios de Holmes. El detective se verá envuelto en un laberinto de antiguas supersticiones y oscuras venganzas, pero tratará de no permitir que las falsedades enturbien su juicio analítico para desenmascarar al asesino de sir Baskerville