Una vez más la escritura de Mauro Gatica Salamanca vuelve a incomodarnos. Lo ominoso comparte en este libro tres vertientes: el mundo de los insectos, la (s) muerte (s) y la literatura. Un mismo sabor de suciedad y repugnancia para poner en jaque la artificiosidad de una belleza simulada para el consumo; no queremos ser lo que, inevitablemente, somos. Así la poesía, en este caso, se servirá de los restos y hará con ellos el espejo de una verdad. La semiótica de una mariposa que se retuerce en la boca de su predador nos hace parte de un lenguaje que a menudo queremos ignorar. Hay una perspectiva contemplativa sin la estetización pulida de cierto paisajismo seudoriental. Aquí y en este tiempo, los insectos –y los
cuerpos todos- solo en la destrucción encuentran salud y belleza. Este libro nos expone a la podredumbre del bien y el mal como construcción base de un reino terminado. Los presupuestos han caído, una mosca puede ser más bella que el oro pornográfico de la civilización. Diego L. García